lecciones

viernes, 26 de abril de 2013 a las 11:47
Con la cara quemada por el sol 
abro la ventana. 
La lluvia cae ante mis ojos 
(y mi pijama). 

Alguien dijo: 
nunca llueve eternamente, 
La vida es siempre ámbar, 
intermitente. 

La fe ciega en segundas partes 
dura lo mismo que los amantes. 
Dos días de alegría, 
cuatro de calmantes. 

Y todo esto, ¿para qué? 
Para no olvidar el antes... 
y aprovechar el después.

Imperfectamente | Powered by Blogger | Entries (RSS) | Comments (RSS) | Designed by MB Web Design | XML Coded By Cahayabiru.com