Inspiración

martes, 24 de marzo de 2009 a las 1:05
Trigo. Silencio.
No necesito más.
Me tiemblan las manos. La voz se quiebra antes de que mis palabras vuelen y se deslicen entre las ramitas doradas.
Pero no importa, porque nadie me escucha. Podría gritar, pero nadie acudiría. Podría volverme loca, nadie vendría a retenerme.
La indiferencia es el arma más dura. Y ahora, inspiración perdida, abandonada, comprendo que me quieras tratar así. Me lo merezco.
No se puede guardar eternamente la energía. Debe fluir, bailar, conocer mundo. Por mucho que esa energía aparezca en los momentos menos oportunos, debe ser liberada.
Lo siento, aunque sé que no te importará. Que vendrás como todas las noches a mi habitación, a la oscuridad de mi subconsciente, a abrirme los ojos y dejarme horas mirando al techo, a susurrarme preguntas al oído que no puedo responder.
Eres dura.
Pero eso me gusta.
Porque me demuestra que yo te creé.

Imperfectamente | Powered by Blogger | Entries (RSS) | Comments (RSS) | Designed by MB Web Design | XML Coded By Cahayabiru.com